18 jul 2011

No todas las ideas están en el papel


Uno de los objetos más utilizados a lo largo de nuestra historia, e indispensable en la actualidad, es el papel, del cual hoy en día se desechan aproximadamente 22 millones de toneladas por año en México y la cifra se incrementa con los años.

Desde la antigua China aproximadamente en el año 200 A.C. Se molía una pasta vegetal y se cortaba en finas láminas para plasmar principalmente historia y cifras. Su elaboración era costosa, extensa por sus componentes y muy tardada, por esa razón no todos podían utilizarlo. Conforme avanzaban las necesidades y la tecnología, el papel evolucionó en sus ingredientes haciendo lo con materiales más económicos, un diseños más prácticos y se extendió por todo el mundo para conocerlo como hoy en día, diferentes formas, colores, olores, tamaños, etc.


Según estudios de la PROFECO el año pasado se estimó que cada persona consume alrededor de 183 kilos de papel por año, se cortan casi 500 mil árboles por día para cubrir la demanda de papel al menos en nuestro país, las cifras son realmente alarmantes y en algunos estados la PROFECO manda personal a escuelas para advertir a niños y jóvenes del daño en el medio ambiente, causado por el mal uso del papel.

Hace pocos años, José Antonio Barrera, presidente de la Cámara del Papel, dijo que en 1970 se recuperaban sólo 350 mil toneladas de papel de desperdicio, los cuales se trataban de trasladar a otra área que no contaminara tanto. En la actualidad México ocupa el tercer lugar a nivel mundial en reciclaje de papel, con 4.5 millones de toneladas de papel desperdiciado al año.


A continuación les dejaré algunas recomendaciones:

  • Enseñar a los niños a pasar las hojas sin humedecerse los dedos y no doblar las esquinas.
  • Revisar que las pastas y hojas estén firmemente unidas, de preferencia que estén pegadas y cocidas.
  • Escribir con un tamaño chico de letra para no desperdiciar espacio, no importa salirse del margen.
  • Asegurarse de tener el mayor espacio ocupado para cambiar de hoja.
  • Reciclar papel utilizado por un lado.
  • No desechar libretas incompletas en su llenado, se pueden despastar y juntarse con más para hacer nuevas.
  • Depositar los papeles inservibles en una misma bolsa para ayudar a su reciclaje.
  • No utilizar innecesariamente hojas de colores, ya que están fabricadas con muchos químicos que tardan en degradarse y es difícil de reciclar con otras.
  • Si se adquiere una libreta, tratar de comprar una de hojas recicladas.
  • No quemar el papel, esto sólo provoca contaminación al aire que respiramos.
  • No depositar el papel en agua, ya que sus componentes se vuelven diminutos y mortíferos incluso para otras especies.


Para finalizar, les dejo la siguiente frase:

En la lucha entre uno y el mundo, hay que estar de parte del mundo.
- Frank Kafka.

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