18 jun 2011

Maltrato animal

La marginación a los animales callejeros se ha convertido en un problema social, donde nadie se quiere hacer cargo de ello ni se le da importancia para erradicarlo, realmente afecta en la vida cotidiana y basta con salir a la calle para observar un poco del sufrimiento de estos solitarios animales.






¿Cómo comienza todo? En México está estimado que entre la Cuidad de México y el Distrito Federal, hay alrededor de 3 millones de animales callejeros, hablando principalmente de perros y gatos, los cuales pasan su vida entera o parte de ella buscando el calor humano, alguien que cuide de ellos, les brinde alimento, amor, casa y compañía, entre otras cosas. Sin embargo en México tenemos una educación aún muy básica en cuanto al control y cuidado de los animales, hay personas quienes adoptan animales, están siempre cuidando de ellos y los tratan como si fuesen miembros familiares. Por otro lado hay quienes tienen un pensamiento mediocre, vacío y superficial con el que aseguran que un animal es un “estorbo” y cuando tienen la oportunidad se dan el tiempo de maltratar o agredir a esos animales, ejemplo de ello son los casos donde los envenenan, los llevan a un lugar específico, después los agreden con piedras, objetos o por propia mano y en algunos casos los llegan a matan o les dejan heridas graves. En casos especiales hay personas quienes torturan a los animales, ya sea deteriorando su salud, dejándolos sin comer, golpeándolos, quemándolos, mutilándolos, entre otras acciones desagradables.







A nivel nacional, el gobierno manda electrocutar a todo animal que se encuentre, sin hacer distinción entre razas o posible vivienda que pudiese tener, pero de cualquier manera no puede hacer mucho el gobierno ya que no cuenta con centros o instituciones que se encarguen de estos animales. Sin embargo no es la solución adecuada para suprimir el problema, ya que cuando se eliminan un cierto grupo de animales callejeros, se siguen reproduciendo y a corto tiempo se duplica el número de animales.


Por ello algunas de las formas fáciles de actuar y no terminar con la vida, es adoptar animales callejeros, llevarlos a una revisión y brindarles lo necesario para una buena salud, es fundamental conocerse a sí mismo para poder planificar tener una mascota, si se tiene un carácter muy fuerte, se es agresivo, simplemente se cuenta con conductas que no le son fáciles de dominar, es preferible no dañar a seres que necesitan de amor y el calor de la compañía, después de haber sufrido entre calles.





Por otra parte no basta con adoptar y tener a una mascota en casa, se debe esterilizar, vacunar, cuidar y brindarle los servicios necesarios para que sea un animal saludable. También se debe educar a todo individuo que conviva con la mascota para que reciba una vida digna libre de maltrato, especialmente se debe dar el ejemplo del cuidado a los niños que les gusta jugar con poca cautela, la responsabilidad de un animal hace a las personas mejores tanto en lo individual como a nivel social.





Como último punto, los invito a reflexionar, el hombre se define como un ser lleno de valores, virtudes, habilidades y sobre todo por tener lo más valioso en el mundo… la razón, así que hay que usarla y preguntarnos ¿Si nosotros somos dueños de nuestro propio destino y felicidad, por qué no brindarles un poco de cariño a un animal que nos puede ser un excelente compañero de vida?

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