Árboles; especies de la tierra, no del hombre.

Como sabemos la población mundial aumenta día con día y con ello también la demanda de objetos materiales para cubrir sus necesidades, sin embargo es tanto el crecimiento que tenemos que adoptar y aceptar nuevas formas de vida, como vivir en espacios reducidos, tener menos oportunidades, competir por bienes y/o servicios con cientos o miles de personas, entre muchos otros aspectos, pero uno que es muy importante y poco analizado es la deforestación y sus consecuencias. 



Hoy en día notamos muchos anuncios publicitarios donde instituciones se preocupan y “se comprometen por un mundo mejor”, también se dicen ser protectores del medio ambiente, sin embargo para producir sus numerosos objetos comunes como lápices, escritorios, puertas, mesas, etcétera, son hechos a costa del abuso de recursos naturales. Los árboles son la fuente más explotada a nivel mundial, pero ¿en verdad nos preocupamos por ellos?, según datos del INEGI maneja que “en México se han cortado más árboles de los que se han sembrado, los bosques no se han recuperado y existen especies que están en peligro de extinción”, y la tala ilegal ayuda a la gran pérdida de estos bellos seres vivientes.

A través de los años, los árboles han sido considerados como lo más preciado que hemos podido tener, ya que ayudan en muchos aspectos a las millones de especies y personas que han pisado el mundo. La naturaleza nos ofrece de ellos frutos para poder sobrevivir, oxígeno que respirar, sujetar la tierra suelta, ayudar a los ciclos hidráulicos, regular el clima, dan albergue a cientos de especies diminutas como los insectos, dispersan la lluvia con sus copas, algunas de sus raíces o demás partes del vástago funcionan como plantas medicinales, dan un objeto adaptable de paz, tranquilidad, contemplación, son un espacio de reflexión, entre muchas otras funciones. Es indignante abrir los ojos y saber que el capitalismo es el principal manipulador de la población, que incita a consumir innecesariamente artículos sin un límite ambiental.

Es comprensible pensar en las necesidades que tiene el ser humano, y seamos realistas los árboles aportan un 20% de gas invernadero en el mundo, sin embargo su cifra es natural y si no fuese alterada por su poca existencia y el smog mortífero de industrias, coches, etcétera, realmente pudiésemos vivir mejor.

Aquí te dejo algunos datos interesantes que hacen cambiar la perspectiva de los recursos que consumimos:

• · Se necesitan 2,56 toneladas de madera para poder producir una tonelada de papel.
• · Es necesario un aproximado de 22 árboles para cubrir la demanda de oxígeno de un individuo en 1 día y 41 hectáreas para 18 personas.
• · En la vida de un árbol, se estima que convierte 730 kilogramos de dióxido de carbono en oxígeno.
• · Un árbol absorbe un poco del gas tóxico de 100 coches.

Después de leer el texto anterior, piensa un poco de las cifras y sus consecuencias y reflexiona ¿si la información es actual, qué te gustaría dejar a tus descendientes? ¿Cuánto has ayudado al planeta para no contribuir a la explotación mencionada?, cada vez que vayas de compras ¿En verdad necesitas ese artículo? 

Quizá seamos pocos quienes busquemos una mejora ambiental y social, pero no es imposible, es necesaria. No lo dejes al “destino” y para finalizar una frase:

“Los hombres no son prisioneros del destino; sólo son prisioneros de sus propias mentes”
Franklin D. Roosevelt.

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